¿Cuáles son las fases del enamoramiento?

El proceso del amor no es lineal, no permanece inmutable y está sujeta a cambios. Es normal sentir que con el paso del tiempo una relación de pareja cambia, nuestros sentimientos se transforman, nos conocemos mucho mejor.

Es algo completamente común y pasa en todas las relaciones. El amor está compuesto por 3 fases o etapas diferenciadas y a las cuales se llega con el pasar de los días y cuanto más nos conocemos mutuamente.

Esto no quiere decir que se apagará la chispa entre ambos, sólo quiere decir que no será igual y lo que al principio pudiera ser un deseo sexual incontrolable, se convierta en mayor compromiso y madurez.

Según estudios, las principales etapas o fases del amor se pueden dividir en 3 bien diferenciadas: enamoramiento, amor y compromiso.

1. Primera fase: enamoramiento

Lo que ocurre en esta primera fase se puede definir como una idealización de la otra persona. No apreciamos sus defectos y el sentimiento de añoranza es grande cuando no se está el uno junto al otro y se da un gran deseo de volverse a encontrar lo más pronto posible para volver a verse.

Características de la primera fase:

• Atracción sexual y química. En esta etapa del enamoramiento nuestro cerebro se lleva de diferentes tipos de hormonas que hacen que nuestro deseo sexual se encuentre disparado.
   
• Ver solo las virtudes. La idealización es una de las características más determinantes. Normalmente las personas se centran en las similitudes que tienen junto al otro e ignoran todos sus defectos.
   
• Evitar los conflictos. En esta fase, los conflictos prácticamente son inexistentes, se evitan por ambas partes.

Según diferentes estudios, esta fase del amor suele durar entre seis meses y dos años.

2. Segunda fase: amor e intimidad

En este punto, esa idealización de la pareja se comienza a perder, comienza a ser evidentes sus defectos y sus pensamientos o reacciones. Además, pueden comenzar a aparecer los primeros signos de rutina y aburrimiento.

Características de la segunda fase:

• Unión afectiva. Se genera un mayor equilibrio físico y emocional en la relación. Es en esta fase donde las parejas se comienzan a dar cuenta si realmente quieren estar juntos o de lo contrario no están hechas la una para la otra.
   
• Comienzas a ver sus defectos. Las personas empiezan a ver lo que realmente no les gusta de la persona que tienen a lado.

3. Tercera fase: Compromiso

Se basa como pilar fundamental en el cariño, sobre cualquier otro sentimiento. El romanticismo disminuye en gran medida y la pasión sexual se reduce aún más.

El compromiso alcanza su punto máximo y se consolida.

Características de la tercera fase:

• Madurez de la relación. Llegar a este punto y mantenerse requiere de una gran madurez por ambas partes y no todas las parejas pueden llegar a ella.
   
• Mayor conexión. Las personas se sienten muy conectadas dentro de esta fase del amor. La confianza es una de las características clave de esta etapa en una relación.

Independientemente de que en fase se encuentre tu relación, debe proporcionar aspectos positivos que nos hagan sentir que compartir la vida es preferible a estar solo, de lo contrario significa que algo no funciona como debería.