Meghan Markle: La dieta de la futura esposa del príncipe Harry incluye papas fritas y vino

La historia de amor de Meghan Markle y el príncipe Harry es muy hermosa. Ellos, al igual que los duques de Cambridge, Guillermo y Kate, lograron superar el prejuicio de que las personas de la realeza se casen con alguien de su mismo estatus.

Por esta razón, Meghan y Harry tendrán su propia película en la que nos enteraremos cómo se desarrolló esta hermosa historia de amor. La cinta se estrenará el 13 de mayo, seis días antes de la boda de la pareja.

Cuando nos enteramos que Meghan era parte del mundo de Hollywood, y que en un mes se convertirá en parte de la realeza inglesa, pensamos que tiene una dieta estricta para mantener su perfecta anatomía.

Pero es todo lo contrario, Meghan tiene una alimentación normal, e incluso consume papas fritas, vino y helado de vez en cuando.

Aunque la futura esposa del príncipe Harry tiene una dieta equilibrada, en la que se basa en consumir muchas frutas y verduras, ella reconoce que hay ciertos placeres de la vida que nadie se puede negar.

"Trato de llevar una dieta vegetariana durante la semana y tengo más flexibilidad durante el fin de semana. Todo se basa en el equilibrio".

"Trabajo mucho y, por eso, no quiero sentirme privada de nada. Siento que en el momento en que lo haces es cuando empiezas a obsesionarte con las cosas. Por eso no sigo una dieta, sino una alimentación saludable y equilibrada".

Meghan confesó que su alimentación de lunes a viernes se basa en ensaladas completas, sus batidos con semillas y lácteos, sus platos también son combinados con pastas, pescados, frutas y huevos.

Los fines de semana, se da algunas licencias, por ejemplo, disfrutar de sus dos grandes placeres: las papas fritas y el vino.

"Podría comer papas fritas todos los días. Y me encanta la pasta. Bueno, me encantan los carbohidratos, pero, ¿a quién no?", declaró Markle.

"Y me ocurre lo mismo con el vino. Por supuesto que voy a tomarme esa copa de vino, es delicioso y lo disfruto. Todos deberíamos hacer las cosas con las que disfrutamos dentro de lo razonable".

Aunque Meghan se dé algunos gustitos, su alimentación a diario es muy saludable. Ella confiesa que le encanta cocinar con productos frescos.

Esto se debe a que desde pequeña vivió en California y ahí su familia tiene un huerto donde cultivan sus propias frutas y verduras.

 

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