Por: Alannis Castañeda • Whatthegirl.com

10 lecciones de vida que tu perro te regala cada día en casa

¿Podemos aprender de nuestras mascotas? Más de lo que tú te imaginas.

Los perros llegan a nuestra vida para regalarnos maravillosos aprendizajes. Foto: Shutterstock
Los perros llegan a nuestra vida para regalarnos maravillosos aprendizajes. Foto: Shutterstock

¿Podemos aprender de nuestras mascotas? Más de lo que tú te imaginas.

¡Tu amigo fiel! Nuestros perritos, siempre tienen una sonrisa lista para regalarte, son pura lealtad y amor incondicional. Deberíamos tener más presente en nuestra vida diaria la bondad que reflejan nuestros peluditos.

Aunque puedan parecer criaturas simples, podemos aprender mucho de ellos para mejorar como personas y, lo más importante, ¡para encontrar más alegría en nuestra vida!  Aprende las 10 lecciones que tu perro tiene para enseñarte y descubrirás cómo ser un poco más "perro" te traerá mayor felicidad:

  1. Cuando tus seres queridos lleguen a casa, siempre corre a saludarlos

Al finalizar nuestra jornada laboral o académica lo único que queremos es llegar lo más antes posible a nuestro hogar y compartir tiempo de calidad con nuestros seres amados, ya que nos da esa sensación de calidez y amor reduciendo todo el estrés acumulado del día. Nuestros perritos, son los primeros en saludar, saltar o correr por toda la casa, son conscientes que el contacto físico es terapéutico para nosotros y ellos, por eso al ver que llegan de casa tu mamá, papá, hermanos ¡abrázalos! Pregúntales sobre su día, hazlos sentir amados e importantes.

  1. ¡No dejes la oportunidad de salir a pasear!

El llevar una vida sedentaria es perjudicial para nuestra salud, siempre es bueno llevar una rutina saludable y no hay nada más simple que salir a caminar o pasear puede ser en tu parque más cercano o hasta un centro comercial ¡engríete!, ponte un lindo outfit, ojo usa zapatos cómodos y ve por un helado o café, invita a tus amigos, tu pareja o tu familia comparte tiempo de calidad o puedes ir tu sola, lo importante es salir, despejar la mente y reducir el estrés.

  1. Descansa ¡Tómate tu tiempo!

Conocer tus límites es importante, los perros son conscientes de la importancia del descanso y el sueño. A diferencia de nosotros, que solemos ser exagerados y nos sobre exigimos más de lo normal para ello es importante reconocer y valorar nuestro tiempo y así evitar esfuerzos innecesarios.  Adoptando esta rutina podemos contrarrestar el estrés y mantener nuestros días más equilibrados.

  1. Permite que la experiencia de sentir el viento en la cara sea todo un éxtasis ¡Vive el momento!

El futuro puede parecer abrumador, sobrepensar las cosas o posibles situaciones que no suceden nos genera un daño emocional, para ello es importante vivir cada día de nuestra vida como si fuera el último, nuestros compañeros caninos son ejemplo vivo de ello, disfrutando cada pequeño detalle. El entorno del día a día es vital para apreciar los gestos más pequeños de nuestros seres amados, los paisajes que nos regala la naturaleza y sobre todo nuestra existencia.

  1. Evita morder cuando con un solo gruñido sea suficiente ¡Sé empática!

Al igual que los humanos, los perros también mostrarán su enfado en ciertas ocasiones. Es importante saber perdonar, escuchar y ser honesto, dejar de lado el rencor y hablar sobre lo que nos afecta realmente, sin agredir a la otra persona, recuerda que en momentos de ira podemos decir palabras hirientes por eso debemos solucionar los problemas con calma y respeto.

  1. Disfruta de las cosas simples

¡Los momentos pequeños nos pueden hacer felices! Nuestras mascotas viven del día a día, apreciando los detalles que nosotros tenemos con ellos, algo tan simple como darles su comida o sacarlos a pasear puede resultar en un día maravilloso para ellos.

En la actualidad, las redes sociales nos crean la necesidad de comprar cosas que “pueden” hacernos felices ya sea tener un teléfono o un auto, pero la vida no se trata de mientras más tengas, más feliz serás es todo lo contrario la vida se limita a disfrutar cada momento, gozar de nuestra salud y los momentos junto a nuestros seres amados ¡Carpe diem!

  1. Nunca pretendas algo que no eres, sé auténtica

Los perros no se la pasan pensando en cómo actuar ante los demás, apliquemos lo mismo en nuestro día a día. El que usar o tu apariencia no te define como persona, son las acciones que realizamos por nosotros y los demás lo que nos caracterizan ante el mundo, podemos estar pasando por un mal momento, pero siempre debemos salir adelante, recuerda que todo es temporal hasta los malos días, se auténtica y disfruta de la vida.

  1. Si lo que quieres está enterrado búscalo persistentemente ¡No te rindas!

La perseverancia no hace más humanos, si tenemos un objetivo en mente debemos ser determinadas, organizarnos y trabajar en ello, los resultados pueden llegar a sorprenderte, incluso puedes aprender en el proceso, adquirir experiencias que te definan como persona tanto en el ámbito laboral y personal.

  1. Cuando estés feliz baila, moviendo todo tu cuerpo

Nuestras mascotas suelen ser muy expresivos, aprendamos de ello dejando las limitaciones que nos rodean, sin reprimir nuestras emociones o vivir del qué dirán, al final del camino solo estamos nosotras y nuestros seres amados.

Recuerda que las emociones son nuestro lado más humano, el sentir es algo hermoso y reflejar nuestros sentimientos nos conecta con las personas ya que nadie puede leer nuestra mente y adivinar cómo nos sentimos, conversa con los demás, socializa y celebra tus éxitos.

  1. Cuando alguien tenga un mal día quédate en silencio, mantente cerca y hacerle sentir que estás ahí

Demostrar interés en quienes nos importan, fortalece los vínculos afectivos con lo que más amamos, recuerda que ellos harían lo mismo por nosotros y el estar ausente puede perjudicar esta fraternidad. No es necesario hablar o decir un súper consejo, el simple hecho de estar disponible en ese momento demuestra el apoyo y el amor que le tienes a esa persona. ¡Los hechos hablan por sí solos!

Los perritos llegan a nuestras vidas para regalarnos amor incondicional.

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