¿Por qué me molesta que mi pareja salga a jugar al fútbol con sus amigos?

Queridas, hoy quiero hablarles de un tema que, aunque pueda parecer trivial, en realidad puede ser un punto de fricción en muchas relaciones: la pasión de nuestra pareja por el fútbol. ¿Cuántas veces nos hemos encontrado pensando con un dejo de celos "mi pareja prefiere ver el fútbol en lugar de pasar tiempo conmigo"? Aunque pueda parecernos una simpleza, estos momentos pueden desvelar sentimientos más profundos que necesitamos abordar.

Entender lo que realmente nos molesta cuando nuestra pareja elige pasar tiempo con sus amigos y su deporte favorito, en lugar de con nosotras, es crucial. A veces, detrás de ese enojo se esconden celos y desconfianza, sentimientos que debemos reconocer y trabajar, ya que la base de cualquier relación saludable es la confianza y el respeto mutuo.

Jennifer Ospina, psicóloga colombiana especialista en Terapia de Pareja, nos ofrece una perspectiva interesante. Según ella, es natural que cada uno tenga sus propios intereses y espacios personales, incluso en una relación de pareja. El problema surge cuando un hobby, como el fútbol, se convierte en una obsesión, dejando poco o ningún espacio para la pareja. Es entonces cuando necesitamos hablar y establecer límites saludables.

Entonces, ¿qué podemos hacer cuando el fútbol parece ser el tercer integrante de nuestra relación? Aquí van algunos consejos:

1. Reconoce tus emociones: Es importante entender por qué te molesta que tu pareja disfrute del fútbol. ¿Es realmente el deporte el problema, o es la cantidad de tiempo que pasa fuera lo que te inquieta?
2. Comunica, no confrontes: Hablar de cómo te sientes es clave. Expresa tus preocupaciones sin atacar su pasión por el fútbol. La idea es encontrar un equilibrio, no eliminar lo que a él le gusta.
3. Negocien su tiempo: Establezcan acuerdos sobre cuándo y cómo pasarán tiempo juntos, y cuándo cada uno podrá disfrutar de sus hobbies. Esto ayuda a crear un equilibrio entre el tiempo en pareja y el tiempo personal.
4. Interésate (un poco): No tienes que convertirte en la fan número uno, pero mostrar interés por su pasión puede acercarlos. Pregunta, aprende, e incluso participa de vez en cuando.
5. Busca tu espacio: Aprovecha esos momentos para dedicarte a lo que te gusta. La independencia en la pareja es tan importante como los momentos compartidos.
6. Regalos temáticos: Si se acerca una fecha especial, ¿por qué no regalarle algo relacionado con su equipo favorito? Esto muestra que respetas y valoras sus intereses.
7. Si el fútbol gana siempre: Si después de intentar todo, el fútbol sigue siendo su prioridad absoluta, es momento de una charla seria. Una relación sana se basa en el equilibrio y la mutua consideración.

Entender y respetar los intereses de nuestra pareja es fundamental, pero no debe traducirse en descuidar la relación. Hablar, negociar y, sobre todo, mantener una actitud positiva, nos permitirá encontrar ese equilibrio donde el amor y el fútbol puedan coexistir armoniosamente en nuestras vidas.