¿Quién es el Destripador de Yorkshire?

Una de las películas que ha llamado bastante la atención es la de la historia del asesino de mujeres Ted Bundy que fue protagonizada por el ex chico Disney, Zac Efron. Seguro habrás escuchado de este persona pues en la historia criminal de Estados Unidos y el mundo, es bastante conocida.

Ted Bundy fue conocido como ‘el coleccionista de mujeres’ ya que él había matado a unas 36 jóvenes, pero según los analistas, aseguran que fueron unas 100. Después de conocerse estos macabros asesinatos, fue condenado a la silla eléctrica en 1989.

La película tendrá por título "Extremely Wicked,Shockingly Evil and Vile" y como ya salió en los cines, Netflix ahora tiene los derechos de este film para agregarlo a su parrilla de programación. Los realizadores han querido darle un enfoque diferente a los asesinatos que cometió Bundy en esa época.

No se centrarán en lo que sucedió con las chicas ni cómo lo hizo, sino después de los crímenes, es decir, en su juicio y que por ende, su sentencia a muerte. Es un giro de 180° a las películas de asesinos seriales que conocemos. Tienes que verla porque es muy interesante.

Ha acaparado toda la plataforma debido a que la producción es bastante buena, sin embargo, parece que ha llegado otra que quiere quitarle el puesto. Netflix ha decidido apostar por la historia de un criminal que parecido a Bundy, también acabó con varias chicas.

Esta nueva serie tendrá por nombre "Los crímenes de Yorkshire Ripper". Seguro estarás preguntándote quién es la persona detrás de estos asesinatos, pues es Peter Suttcliffe, un hombre que mató a 13 mujeres y que según los relatos de los familiares de las víctimas, su condena no fue justa.

Este hombre trabajaba como enterrador en el cementerio de su pueblo, Bingley, en Inglaterra. Se dice que mientras estaba haciendo sus labores por la tarde, escuchó unas voces que le hablaban cerca al oído. Así que del nerviosismo dejó caer la pala al hueco que estaba cavando.

Se asustó y caminó hasta encontrar de dónde venía ese sonido ya que de acuerdo a lo que dijo, era una voz dulce, suave, que no le mandaba a hacer cosas, sino las 'sugería'. Cuando llegó al panteón de donde supuestamente le hablaban, era la tumba de un hombre polaco que ahora sí 'le daba órdenes'.

Cuandi llegó a su casa, se convenció que era "la voz de Dios" que le decía qué hacer. Al principio lo describió como un eco gratificante, sin embargo, a medida que pasaba el tiempo, se volvía bastante tosco y amenazador. Un día, una prostituta le quitó unas monedas que tenía y no quiso brindarle su servicio.

Además, en el bar donde se encontraban, ella se burló de él. Peter no pudo soportarlo y comenzó a escuchar las órdenes de "Dios" y le decía que tenía que matar a todas las meretrices posibles ya que no debían de tratar así a ninguna persona.

Así actuaba el "Destripador de Yorkshire"

La manera en la que actuaba Suttcliffe era con instrumentos que podía encontrar en una casa como martillo y cuchillos, lo único que consiguió fue una sierra metálica para desmembrar los cuerpos de sus víctimas. De acuerdo a sus declaraciones, el objeto que prefería era el destornillador ya que le daba punzadas al cuerpo para hacerlo "más blando".

A pesar de ser un hombre de baja estatura, era muy fuerte. Siempre estaba merodeando cerca de las meretrices para que en un descuido les propine un fuerte golpe en el cráneo con un martillo para que éste se partiera y muera al instante.

Cuando no tenía la herramienta en la mano, solo las golepaba tan fuerte que ellas caían al piso y les daba patadas en todo el cuerpo para que se quedaran marcadas las botas negras de cuero que siempre llevaba. A algunas chicas les quitó los órganos, fue ahí que se ganó el apodo de "destripador".

Tras varios intentos de dar con el asesino, el 2 de enero de 1981, dos policías del sur de Yorkshire detectaron un auto sospechoso mal estacionado en la carretera de la entrada a la ciudad, así que ambos fueron a ver qué estaba pasando. Dentro, vieron a Peter junto a una prostituta.

Éste estaba a punto de matarla pero para que la autoridad no lo arreste, tiró las herramientas tan cautelosamente que no se dieron cuenta. El sargento Bob Ring y el agente Robert Hides se acercaron y notaron que las placas estaban mal puestas, así que al revisar notaron que podría tratarse de un auto robado.

De inmediato lo llevaron a la comisaría y empezaron a cuestionarle por los asesinatos ya que el retrato hablado era idéntico a Suttcliffe. Mientras le estaban haciendo preguntas, caía en contradicciones hasta que no pudo con la presión y terminó confesando sus crímenes después de 16 horas de intervención.

El juez que llevó su caso lo halló cuerdo y lo snetenció a cadena perpetua, el lugar donde llevaría su condena fue la prisión de alta seguridad de Parkhurst desde mayo de 1981. Ahí solo estuvo un año y cuatro meses ya que después fue llevado a un hospital psiquiátrico.

Lo llevaron al asilo de Broadmoor porque su vida corría peligro en una cárcel normal. Una de las agresiones más serias que recibió por parte de los otros presos fue que dos de ellos casi le arrebatan el ojo de tanto golpearle ya que les indignó que matara a mujeres. Hasta el día de hoy sigue en ese lugar.