Constelaciones familiares: una nueva forma de terapia
Aunque todavía es desconocida, en los últimos meses ha adquirido popularidad a través de las redes sociales.
Aunque todavía es desconocida, en los últimos meses ha adquirido popularidad a través de las redes sociales.
A lo largo de la historia ha quedado demostrado que la sociedad siempre busca evolucionar a través de nuevas maneras que lo hagan sentir más cómodo. Esto puede ser visto de diferentes formas, pero es natural que como especie, todos sintamos que merezcamos una constante sensación de tranquilidad dentro de nuestro entorno.
Es por ello que en la búsqueda de ese bienestar, también surgió una nueva interrogante, la del plano emocional. Algo que muchas veces ha estado rondando dentro de nosotros, pero que no sabemos cómo es que lo debamos afrontar. Por este motivo es que surgieron ramas especializadas que nos pueden ayudar a comprender lo que ocurre en nuestro interior en el plano sentimental.
Y aunque esto es algo que ha estado dentro de nuestra sociedad desde hace muchas décadas, es en los últimos años que se ha vuelto popular el concepto de la “terapia”, una de las formas más utilizadas por especialistas para tratar este tipo de conflicto. Sin embargo, una nueva definición se ha sumado y parece que ha llegado para quedarse, puesto que se ha vuelto tendencia en los últimos meses, hablamos de las constelaciones familiares.
Pero, ¿qué son? Se podría definir como un método terapéutico que investigó y desarrolló Bert Hellinger, por el cual podemos sanar traumas, heridas propias o aquellos conflictos que puedan estar relacionados con parientes del pasado, incluso con los que no logramos coincidir en este plano terrenal. Sin embargo, hay que dejar muy en claro que las constelaciones familiares no quieren quitarle importancia a la medicina tradicional.
Este es un punto muy significativo de las constelaciones familiares, ya que de acuerdo a muchos profesionales de la psicología, la medicina tradicional y las terapias alternativas no pueden llegar a complementarse de una manera correcta. Pero, en el caso de las constelaciones familiares, se sugiere que este tipo de prácticas pueden integrarse de manera complementaria en un enfoque terapéutico que abarque muchas más ramas.
La duración de las sesiones pueden ir desde media hora hasta una hora, pero va a depender mucho de cada paciente y de los facilitadores, ya que no es algo sencillo de lograr. Si estás buscando realizar este proceso, lo ideal sería que te asesores con profesionales en la materia, puesto que cada caso es completamente diferente.