¿Cuánto debe durar el duelo de una madre cuando pierde a un hijo?

María del Carmen Martínez Casanova, perdió a Pedro, su hijo de 24 años, quien falleció el día 27 de junio, sin embargo, en el lugar donde trabajaba, le dijeron que tenía que retomar sus labores el día 30 de ese mes.

Whatthegirl.com
Whatthegirl.com

María del Carmen Martínez Casanova, perdió a Pedro, su hijo de 24 años, quien falleció el día 27 de junio, sin embargo, en el lugar donde trabajaba, le dijeron que tenía que retomar sus labores el día 30 de ese mes.

Perder un hijo debe ser el momento más doloroso para una madre, no se sabe el tiempo de luto que se debe llevar pero hay personas o entidades que no son nada empáticas con esta situación.

Una doctora de atención primaria, María del Carmen Martínez Casanova, perdió a Pedro, su hijo de 24 años, quien falleció el día 27 de junio, sin embargo, en el lugar donde trabajaba, le dijeron que tenía que retomar sus labores el día 30 de ese mes.

Es decir, tres días después, ¿puedes creerlo? María cuenta su caso a través de Facebook diciendo lo trágico y triste que es perder a un hijo, luego se hace la pregunta “¿Dónde está publicado que el duelo de una madre dure tres días?”

Esto ha tenido muchos compartidos en las redes sociales ya que varias personas se han solidarizado con ella. Martínez asegura que sí regresará a trabajar a pesar de que esté de duelo.

¿Sabes por qué? Porque así está escrito en el protocolo que maneja su entidad laboral. Este dice que si un pariente de primer grado fallece, el duelo solo será de tres días.

Aunque para muchos nos parezca tiempo poco suficiente para recuperarse de esa pérdida, así está escrito en la clínica Fuengirola donde María del Carmen trabaja.

En su post de Facebook, hace un llamado a los encargados de esa norma que está vigente desde hace 60 años:

“No soy la única ni la última madre que pierde a un hijo. Por ello, les pido que tengan en cuenta nuestra situación revisando y corrigiendo la legislación vigente desde 1960 y, que dentro de lo que esté en sus manos, promuevan mi petición a las instancias responsables de la legislación laboral”.

Además, pide que sean empáticos con las madres que han pasado con ella y con ella que trabaja en un hospital porque no se siente preparada para cuidar a otras personas después de tener una pérdida grande:

“La pérdida de un hijo la considero un parto hacia otra vida. Aunque no hay un bebé que cuidar, sí que hay una madre que necesita cuidados. Y en tres días no está preparada para cuidar a otros: necesita un permiso retribuido diferente”.

María tiene dos hijos más, José Ángel y María del Mar de 33 y 32 años respectivamente. Cuando Pedro falleció, María del Carmen estaba fuera de España y eso fue lo que más le dolió.

Se quejó de que se tenga que reincorporar rápido a su trabajo después de tres días de duelo:

“¿Acaso creen que el dolor que se siente no tiene implicaciones para la salud del trabajador y para desempeñar un trabajo con tanta responsabilidad y sobrecarga?”

Puede que cada madre lo tome diferente, pero en su caso, fue bastante doloroso. Además, tiene que entrar a la habitación de su hijo y guardar su ropa, ver sus fotos y más, cosa que no ayuda a recuperarse del duelo.

Repasar sus ropas, sus papeles y sus recuerdos para encontrarles un destino adecuado. Dicen que eso facilita el proceso del duelo, pero ¿dónde está publicado que el duelo de una madre dure tres días?”

Como ya era de esperarse, Martínez tuvo que regresar a sus labores y aseguró que sus compañeros son los mejores ya que comprendieron su dolor y la ayudaron a realizar su trabajo porque ella no estaba del todo concentrada:

“No todas las madres trabajadoras tienen un médico comprensivo ni creo que esa falta de la legislación deba cargar en los médicos de atención primaria”.

Cuenta que el tema del sepelio, defunción y esas cosas no se hacen en tres días, es por eso que le da pena el sistema porque no hay una ayuda para las madres que la necesitan.

 

 

La muerte de un hijo deja una huella de dolor que por siempre estará gravada en el corazón de sus padres. Una parte de ellos se va junto a su hijo mientras que el futuro cambia para siempre… no sólo pierden su presencia física sino también todos los sueños, proyectos y expectativas que tenían en mente desde antes que naciera. Es que esta muerte va en contra del orden natural de la vida. Por eso, su muerte te lleva a transitar una crisis vital profunda en la que todos los principios filosóficos, espirituales y sistema de valores que hasta entonces te guiaban quedan en jaque absoluto. Los padres se cuestionan si la vida tendrá algún sentido mientras se preguntan: “¿Cómo voy a hacer para sobrevivir al dolor de su ausencia?”. El enojo se apodera de ellos como un huracán que desea arrasar con todo lo que encuentra a su paso, entonces Dios, los médicos, su pareja e inclusive ellos mismos se convierten en blanco de ataques por no poder haber evitado esta muerte. . Por supuesto, cada padre afrontará este duelo de manera absolutamente personal dependiendo de su historia familiar, experiencias previas de duelo y el vínculo que lo unía a su hijo. Esto no significa que a un padre le dolerá más o menos que a otro sino que, en base a estas variables, cada uno construirá su propio camino de sanación. Es posible que esto traiga tensiones en la dinámica familiar afectando a la armonía de la pareja… las emociones están a flor de piel mientras que la irritación y la culpa surgen con una fuerza inusitada. Sin embargo, tu dolor es tan profundo como lo es para tu pareja, sólo que él o ella lo enfrenta y expresa de un modo distinto. Brindarle a cada miembro de la familia el espacio que necesita para hacer su duelo es tan importante como ser pacientes entre ustedes mismos para así construir espacios de comunicación en donde sea posible hablar libremente de sus sentimientos. . ?? manejodelduelo.com - #AprenderDelDuelo #PerderUnHijo #Duelo #HablemosDelDuelo

A post shared by Hablemos del Duelo (@delduelo) on