“Sexy por Accidente”: estas son las razones por las que debes ver esta película

Seguro pensarás que es la típica chica que tiene problemas a pesar de ser millonaria, que vive en una mansión y que se casa con el hombre soñado, pues déjame decirte que no es así.

En primer lugar, debes saber que se trata de una mujer común y corriente que tiene talla dos y se llama Carrie Bradshaw. Ella, es como todas nosotras y tiene el mismo problema: no siempre se siente hermosa.

Es lo que nos pasa siempre. Sé que es cuestión de autoestima pero vamos, ¿a quién no le da esos problemas existenciales alguna vez en su vida? Sé que a muchas, por no decir todas.

Sé que después de verla te sentirás identificada. No es como crees: no tiene amigas de plata, ni con estilo, no tiene el mejor trabajo del mundo, es insegura y no es tan bella como suelen vendernos las películas.

Vive en un mundo con estereotipos, así como es ahora, donde si eres muy alta, te molestan, si eres baja, de la misma manera, nada es suficiente para nadie y eso se ve todos los días.

Y eso es lo que quiere dar a entender la película, que nuestra vida está llena de defectos y debemos de dejar de lado ese por qué nos afecta no ser tan bella como quisiéramos.

Estamos tan ocupadas preocupándonos cómo nos ve el resto, que no nos damos cuenta que lo más importante es lo de adentro, lo que nosotras llamamos “belleza interior”.

Sin embargo, esta película nos demuestra que una mujer sí puede cambiar, sí puede ser bella, pero no desde el punto de vista estético,  sino con su actitud. Esa fuerza mental de sentirse empoderadora y enfrentarse a lo que sea con tal de ser ella misma.

Te darás cuenta que una mujer común y corriente puede hacer grandes cosas sin importar su físico porque más adelante, las cirugías no son para toda la vida.

La protagonista, Amy Schumer, nos demuestra que no se necesita un buen cuerpo para ser la heroína de la historia.

Verás que las cremas, botox, colágeno y todo lo demás, no servirán de nada si tienes una mente vacía y eso no es atractivo. En cambio, mostrarte fuerte, ser inteligente y poderosa, sí es ser sexy.