Por qué las mujeres prefieren un anillo de compromiso muy caro

Para algunas es una bonita tradición mientras que, para otras, símbolo de sumisión.

Whatthegirl.com
Whatthegirl.com

Para algunas es una bonita tradición mientras que, para otras, símbolo de sumisión.

El anillo de compromiso simboliza, como su mismo nombre lo dice, el compromiso entre dos personas que se aman y quienes esperan dar el siguiente paso en su relación.

Mientras que para algunas es una tradición en la que no se le debe poner tanta atención, para otras es un elemento primordial, tanto como elegir el vestido ideal para la boda.

En algún momento de nuestras vidas, la mayoría de mujeres hemos soñado con que nuestro ‘príncipe azul’ nos coloque en el dedo un anillo lleno de brillantes, tal y como nuestras estrellas favoritas de Hollywood han llegado a presumir.

También es muy cierto que el novio es quien tiene toda la responsabilidad de comprarlo para pedir la mano de su amada. Aunque lo importante no es el precio, el costo de los mismos dependen del material, la cantidad de piedras preciosas y el diseño. Ten cuenta que una característica principal de la joya tiene que ver con la argolla, pues esta debe ser de una circunferencia perfecta sin entradas ni cortes, ya que simboliza el amor del novio, ‘sin final’.

El anillo debe ser colocado en la mano izquierda, exactamente en el dedo anular. Te estarás preguntando porqué va en ese dedo, pues es simplemente porque es el lugar exacto recorrido por la vena amoris, según los mitos y leyendas.

Por otro lado, mientras unas sueñan con un anillo precioso y perfecto, otras consideran que es un símbolo de sumisión de la mujer que va en contra del feminismo y los ideales de la mujer independiente. Para la actriz y periodista Matilde Suescún, autora del blog feminista ‘Sin pelos en la lengua’ este anillo es un símbolo de pertenencia.

Además, afirma que las mujeres prefieren anillos de compromiso caros para ostentar y presumir el nivel socioeconómico en el que se encuentran. Cuánto más grande el diamante, mayor valor se le da a la mujer que lo lleva. “Es como objetivizar a la mujer”, añade Suescún.

Para la autora, el hecho de que se haga una fiesta de compromiso, es toda una pantomima que algunos consideran romántica, mientras que, a los ojos de ella, esto no es nada más que una celebración absurda. Por otro lado, ella también considera que el hecho de hacer públicas las pedidas de mano, pone en un rol pasivo a la mujer, pues no les da la oportunidad de negarse frente a todo el mundo.

No cabe duda que Matilde tiene un punto de vista muy claro en cuanto a las sortijas de compromiso, sin embargo, todo va a depender de lo que quiere la pareja, si invertir en un bello y costoso anillo o viajar o hacer otras actividades para celebrar esa unión. Todo depende de los dos.