Gaslighting: cuando tu pareja te hace sentir que estás loca

Si eres mujer, es muy probable que en algún momento de tu vida te hayan dicho lo siguiente: “estás loca”, "andas emocional” o “seguro estas en tus días”. ¿Lo has escuchado? Lastimosamente, el prejuicio de que las mujeres son muy emocionales es uno de los más arraigados en la cultura machista.

A pesar de que algunos lo toman como objeto de burla, este estereotipo tiene consecuencias que van más allá. ¿Has escuchado hablar del gaslighting? Por si no lo sabías, es un fenómeno que consiste en menospreciar a la otra persona al afirmar que sus emociones son falsas y exageradas. ¿Quieres saber más?

¿Qué es el gaslighting?

El gaslighting es una de las técnicas de manipulación psicológica más letales que existen. Y si te preguntas: ¿de qué trata? ¡Presta atención! Aquí el manipulador intenta que su víctima comience a cuestionar su propia realidad, que dude de sus propios recuerdos y percepciones, al punto de creer todo lo que el manipulador quiere que crea.

Un estudio realizado por la socióloga e investigadora de Harvard, Paige L. Sweet, define el concepto como un “tipo de abuso psicológico que tiene por objeto hacer creer a la víctima que ha perdido el juicio creando un ambiente interpersonal surreal... El gaslighting se vuelve relevante cuando los perpetradores utilizan estereotipos basados en el género y las inequidades estructurales e institucionales en contra de sus víctimas para manipular la realidad”.

Por si no lo sabías, la palabra Gaslighting se origina por la película "Gaslight”. Cinta que muestra como un hombre hace creer a su mujer que está completamente loca. Así, la manipula poco a poco y la hace creer que ha hecho cosas que en realidad nunca hizo, e incluso él regula la luz de gas y la hace creer que la llama tiene la misma intensidad.

Según Constanza del Rosario, psicóloga especialista en relaciones de pareja y género, “el patriarcado ha forjado una división de género en la que ha situado la razón en los hombres y los sentimientos o la irracionalidad en las mujeres y esa educación de género se nos ha inculcado desde pequeños”.

Señales para detectar si eres víctima del gaslighting

• Dudas o te sientes inseguro casi siempre de tu criterio y opinión. Y, de hecho, necesitas que el resto valide o confirme si lo que dices es cierto.
• Empiezas a dudar de tu memoria. Y, justamente, aparecen porque alguien te repite que tienes mala memoria y te recuerda qué sucedió “realmente”.
• Sientes culpable por todo y aunque creas que no lo eres, puede haber alguien que te convenza de que sí lo eres. Por ese motivo, casi siempre pides disculpas por todo.
• Llegas a considerarte una persona excesivamente sensible porque alguien te ha dicho que: “todo lo tomas muy a pecho”, “que las emociones te ganan” o “siempre buscas una respuesta a todo”.
• Tienes muchas dificultades para tomar alguna decisión, por más pequeñas que sean y antes no te sucedía.
• Te infravaloras, te sientes menos, sientes que no haces las cosas bien y que no mereces ser querido. No confías en ti misma y prefieres alejarte de los demás para no dañarlos.
• Tienes una necesidad constante, disculparte todo el tiempo, tanto por lo que haces como por lo que eres.

Efectos del gaslighting

• Dudas sobre la capacidad para recordar bien.
• Dudas sobre el propio raciocinio.
• Dudas relacionadas con la propia salud mental.
• Un bajo nivel de autoestima.

¿Cómo reaccionar ante una situación de gaslighting?

• Cuestiona la veracidad de lo que te dice esa persona.
• Cree en ti, hazle caso a tu intuición.
• Piensa en tus creencias y opiniones. Más bien deja de querer contentar o agradar a los demás.
• Todo lo que es fundamental para ti, no lo cambies. Confía en tus rasgos o recursos como valores.
• Intenta ver las cosas con perspectiva, desde fuera.