¿Crees que es normal que tengas un "crush" aunque tengas pareja?
Aunque no lo creas, es normal que otras personas llamen tu atención así tú tengas una pareja estable. Presta atención a esta nota.
Aunque no lo creas, es normal que otras personas llamen tu atención así tú tengas una pareja estable. Presta atención a esta nota.
Seguramente alguna vez te ha pasado que, aunque tengas pareja, no puedes evitar fijar la vista en otra persona, como un compañero de trabajo o un vecino de tu edificio. Se llevan bien, comparten momentos juntos y admites que puede que te esté gustando. Pero eso sí, jamás se te ocurriría engañar a tu pareja.
Y aún así, te sientes un poco culpable de esos sentimientos que no puedes evitar pero algo que no sabes es que es más normal de lo que te imaginas. La mayoría cree que tener un “crush” sólo es cosa de adolescentes, sin embargo, la psicóloga Lucía O’Sullivan, de la Universidad de New Brunswick en Canadá, te aliviará un poco ya que indica que cualquier persona adulta puede enamorarse, así estés en una relación que funciona.
Un “crush” es una atracción unilateral hacia otra persona sobre la que no tenemos intención real de comunicarnos. Algunas investigaciones previas han demostrado que los enamoramientos de este tipo son bastante comunes en los adolescentes ya que están experimentando sus primeras atracciones románticas de esta forma porque no saben aún cómo actuar con sus propios sentimientos.
Sin embargo, diversas investigaciones aseguran también que los adultos que tienen relaciones experimentan atracción hacia otras personas. Es decir, pueden fantasear con otros a pesar de que aman profundamente a su pareja. Incluso pueden llegar a coquetear casualmente con su “crush”, a pesar que no tengan intención de que eso pase a otro nivel.
Un dato más sobre el estudio de la psicóloga O’Sullivan y compañeros: las personas en relaciones parecen tener más enamoramientos que las personas que están solteras. Puede sonar raro, pero tiene sentido: los solteros son más propensos a actuar y no dejan que los sentimientos se queden anclados como un amor no correspondido. Los que ya tienen pareja, evitar expresarlo para cuidar su relación.
Lo negativo sería los sentimientos de culpa. Aunque los investigadores descubrieron que en realidad hay pocas personas con relaciones que realmente tengan intención de cumplir esas fantasías que tienen con sus “crushes”.
La investigación concluye con que se necesita tanto la disponibilidad de otros atractivos como una profunda insatisfacción con la relación actual para llevar a una persona a ser infiel a su pareja, así que ya sabes que no debes sentirte culpable si ves que te fijas en otra persona.