Si te gustan la relaciones abiertas ten cuidado, también te puedes enamorar

En un momento de nuestras vidas aparece una persona que llama toda tu atención, que te eriza la piel y causa esa atracción intensa.

La química es fuerte hacia la otra persona que es algo que no lo puedes evitar y terminas involucrándote con él en una relación libre de compromisos y etiquetas, aunque sabes que no deberías aceptar.

En esta materia de salir y compartir la vida íntima la única regla es no enamorarse. Entras a un juego donde puedes ser “la maestra” o terminas siendo “la alumna” y lo mismo pasa con él.

Muchos opinan que estas situaciones te refuerzan como persona y pareja, ya que aprendes a manejar tus emociones y solo disfrutas del momento. Pero como nada es eterno, la frecuencia que tengas al verte con esta persona te hará una jugada en contra.

El tiempo pasa y aunque no lo creas, empiezas a conocerlo un poco más y sin darte cuenta, eso causa una mezcla de sentimientos, entre la pasión y el cariño, como lo habíamos dicho al principio, este te puede suceder a ti o a él.

Este tipo de relación suele ser una relación vacía, y lo peor que puede sucederte es enamorarte de la persona porque sabes que al final terminaras lastimada.

Si eres una amante o decidiste comenzar a serlo recuerda que si decidiste aceptar que las cosas fueran así por que no te gustan las relaciones serias debes aprender a detener ese momento en el que te estas sintiendo confundida.

No hay nada mejor para aprovechar el tiempo y detenerte a pensar con sensatez qué es lo que realmente estás buscando y lo que verdaderamente sientes y si lo mismo le pasa a la otra persona. En todo caso, se tiene que poner las ‘cartas sobre la mesa’ y tomar una decisión.

Si ya no te sientes cómoda en esta “relación”, libérate de eso, no hay nada mejor que estar soltera y disfrutar de una manera diferente o como otras mujeres dicen: “Soltera pero nunca sola”. Elijas lo que elijas recuerda mantener todo bajo control, tener muchas madurez e inteligencia emocional.