Mejores amigas se dieron cuenta que en realidad eran hermanas tras prueba de ADN
Dos mujeres se enteraron que son hermanas luego de 17 años de amistad.
Dos mujeres se enteraron que son hermanas luego de 17 años de amistad.
Las chicas consideramos a nuestras mejores amigas como nuestras hermanas. Aquellas que están dispuestas a escucharnos una y mil veces la misma historia sobre el chico que nos gusta y las que no dudan en darnos una mano cuando lo necesitamos. Sin embargo, no se ve a menudo que dos amigas sean en realidad hermanas de sangre, como el caso de dos mujeres que luego de 17 años de amistad, se enteraron que lo que las unía era un lazo familiar.
Esta es la historia de Ashley Tomas de 31 años y Toya Wimberly de 29, quienes se conocieron mientras cursaban el sexto grado en la Escuela Media de Izberger, en Filadelfia y desde entonces se volvieron inseparables, a tal punto de convertirse en mejores amigas y hacer todo juntas.
Cada una creció en un hogar diferente por lo que nunca sospecharon que serían algo más que amigas y aunque Ashley descubrió en 2005 que su padre, no era su padre biológico, nunca le tomó importancia y siguió unida a él.
Todo comenzó cuando la madre de Thomas falleció. Fue entonces que un amigo de la fallecida vio las fotografías del compromiso de Toya y reconoció al padre de esta, pues indicó que conocía a Kenneth Wimberly como alguien que había pertenecido al pasado amoroso de la madre de Ashley por lo que aseguró que podría ser su padre biológico.
Luego de tal descubrimiento, las mujeres se dieron cuenta del gran parecido entre ambas, e incluso, en una oportunidad, el padre de Toya bromeó con la posibilidad de que Ashley fuera su hija, sin siquiera imaginarse lo que se describiría tiempo después.
Las mujeres, para disipar cualquier posibilidad, se sometieron a una prueba de ADN, la cual confirmó que eran hermanas.
Fue Toya quien se encargó de compartir tal noticia en su cuenta de Facebook, dejando a más de una con la boca abierta, sin embargo, los comentarios fueron de apoyo para la familia que nuevamente se volvía a unir después de 17 años.
Wimberly confesó que admiraba a Ashley como si fuera su hermana mayor por lo que no pudo contener su emoción de enterarse que la mujer que ella admiraba era su realmente su hermana. Desde entonces, las mujeres han sido invitadas por diferentes medios de Estados Unidos para contar un poco más sobre su experiencia.
Estoy segura que todas deseamos que nuestras mejores amigas sean nuestras hermanas perdidas, pero como es eso muy poco probable, con conformamos con que sigan siendo nuestras hermanas de otros padres.