¿Es bueno o malo dormir con nuestras mascotas?

Amigas, todas amamos compartir tiempo con nuestras mascotas, ya sean perros o gatos; siempre serán nuestros consentidos. Pero, ¿qué pasa cuando llega el momento de descansar? A veces son ellos quienes nos buscan, y no podemos resistirnos a esos ojitos. Aunque, en caso de ser una dueña más estricta, les brindamos su propio espacio.

¿Sabías que hay un estudio que nos dice que dormir en compañía de nuestras mascotas es beneficioso para nuestra salud física y emocional? ¡Sí, amigas! Un reciente estudio (An Examination of Adult Women’s Sleep Quality and Sleep Routines in Relation to Pet Ownership and Bedsharing); liderado por la doctora Christy Hoffman, del Canisius College de Buffalo (Estados Unidos) y publicado en la revista National Geographic, reveló resultados sorprendentes. ¿Cuáles son?

En el estudio participaron 962 mujeres jóvenes estadounidenses, donde se analizaron los patrones de sueño de quienes compartían la cama con sus mascotas, ya sean perros o gatos. Los resultados revelaron que los perros son mejores compañeros que los gatos, e incluso que los humanos.

¿Por qué los perros son mejores? ¿Si tengo un gato, no podré dormir bien?

La investigación reveló que las mujeres que duermen con sus perros, ya sea solamente con ellos o también acompañadas de gatos, tienden a levantarse más temprano y de buen humor en comparación con quienes duermen con felinos.

Así es, amigas, al seguir este patrón diariamente, se logra tener una mejor regularidad en los horarios de sueño a lo largo de la semana, lo cual puede relacionarse con las necesidades de cuidado de los perros.

Las voluntarias que participaron en la investigación destacaron la sensación de seguridad y compañía que sintieron al dormir con sus mascotas. En general, reportaron una mejora en la calidad de sueño debido al menor movimiento que suelen tener nuestras mascotas durante la noche, lo que resulta en menos interrupciones al dormir.

Además, se destacaron otros beneficios, como un impacto positivo en la salud mental, ya que, al tener un vínculo afectivo con nuestras mascotas, liberamos serotonina (la hormona de la felicidad) durante nuestro descanso, lo que hace que dormir sea más placentero.