Estudio señala que los hombres se estresan si sus parejas ganan más que ellos

En la antigüedad, los estereotipos sociales habían marcado la vida de las mujeres y los varones, donde ellos eran los que tenían que salir a trabajar y mantener a la familia, mientras que las mujeres solo nos quedábamos en casa cuidando de los hijos y de los quehaceres del hogar.

Tras años de lucha para el empoderamiento de la mujer, esto quedó atrás. Se buscó la igualdad de género y poco a poco se ha ido logrando. Sin embargo, todavía existen personas que creen que es el varón el que debe ganar más dinero dentro de un hogar.

Estos estereotipos de género todavía vienen afectando a la salud mental tanto de varones como de mujeres. Así lo reveló una investigación dirigida por la doctora Joanna Syrda, economista de la Universidad de Bath en el Reino Unido y publicada en SAGE Journals: “si la mujer gana más dinero que el hombre, éste puede sufrir mayor estrés”.

En el estudio se observó a más de 6 mil parejas heterosexuales en Estados Unidos por un periodo de 15 años. Además, esta investigación ayudó a determinar que los esposos se sienten más ansiosos cuando son el único sustento del hogar. Por otro lado, sus niveles de estrés bajan cuando los gastos son compartidos, pero vuelven a elevarse si los ingresos de sus parejas son superiores al 40 %.

“Estos hallazgos sugieren que las normas sociales sobre el sustento masculino -y las convenciones tradicionales sobre hombres que ganan más que sus esposas- pueden ser peligrosas para la salud de los hombres”, explicó la autora principal del artículo.

Según cifras del Pew Research Center en los Estados Unidos, un 30 % de mujeres americanas generan mejores ingresos que sus parejas.

Para la economista, los hombres se estresan porque se sienten como una fuente secundaria de ingresos en el hogar, lo que hace que los niveles de angustia psicológica aumenten.

Además, “las consecuencias de las reversiones tradicionales del rol de género en los matrimonios asociados con los mayores ingresos de las esposas abarcan múltiples dimensiones, incluida la salud física y mental, la satisfacción con la vida, la fidelidad matrimonial, el divorcio y el poder de negociación matrimonial”, señaló Syrda.

Ahora bien, la autora del artículo también afirma que la elevada angustia psicológica en los varones, que viene con la dependencia económica, tiene que ver con el temor de una posible disolución de su matrimonio o a una situación reducida económica en caso de un que se llegara a dar un divorcio.