Café o té: ¿Qué es lo que más se recomienda para la salud?
Son dos de las bebidas preferidas por las personas para empezar su día.
Son dos de las bebidas preferidas por las personas para empezar su día.
Chicas, seguramente muchas de nosotras buscamos siempre tener una alimentación balanceada durante toda nuestra semana. Sin embargo, es importante reconocer que en el caso del desayuno, este suele tener una importancia mayúscula a comparación de los demás, ya que estamos hablando de precisamente y tal y como indica su nombre, el momento en el que rompemos con el ayuno de la noche.
Algunos buscan siempre irse por frutas o por alternativas que tengan que ver con la nutrición. No obstante, hay una opción que durante décadas ha sido parte del desayuno de millones de personas: el café y el té, dos de las infusiones más consumidas a nivel mundial y que destacan por su notable sabor que es del agrado de muchos.
Ante ello aparece el cuestionamiento de qué opción es la más saludable y es que pese a que no existe una respuesta muy concisa, va a depender mucho de qué es lo que se busque e incluso cuál es la reacción del cuerpo de cada persona ante cada bebida. Recordemos que no solo se trata de alternativas muy agradables, sino de que también tienen un efecto en nuestro funcionamiento.
Café o té, ¿qué opción es más saludable?
Para empezar con las comparaciones, es esencial saber cuáles son los beneficios de ambos y en el caso del té, es un componente clave que mejora la atención y mantiene el cerebro alerta. Además, a pesar de contener cafeína, la cantidad no es tan alta como para interferir con el sueño de la persona, por lo que es recomendado para largas jornadas de trabajo o estudio.
Adicionalmente, se ha demostrado a través de estudio que posee compuestos vegetales que pueden ayudar en el control del azúcar en la sangre. Mientras que por el lado del estrés, investigaciones aseguran que contrarresta este problema y que incluso reduce los niveles de cortisol, la hormona relacionada con el estrés.
En el caso del café, se ha demostrado que reduce el riesgo de enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares. Además, investigaciones adicionales han vinculado al café con menores riesgos de cáncer colorrectal, de próstata, de hígado y de endometrio, entre otros.
En el caso de la diabetes, grandes estudios demostraron que aquellas personas que beben café con constancia tienen menos probabilidades de desarrollar diabetes tipo 2. Aunque la cafeína pueda provocar un aumento temporal en los niveles de azúcar en la sangre, los polifenoles como el ácido clorogénico parecen mejorar la sensibilidad de la insulina.
Hablar sobre una opción mejor que la otra es algo muy gaseoso, por lo que dependerá de cada persona lo que decida consumir. Aunque, es recomendable darle una pausa a ambas y no solo centrarse en una sola opción. Si bien es cierto las dos alternativas son saludables, todo en exceso es dañino y estas dos bebidas no son la excepción.