¡Atención! Esta es la manera correcta de hidratarse de manera diaria

Chicas, estoy segura de que muchas de nosotras hemos tenido algún momento en nuestras vidas en los que quisimos adoptar una rutina completamente saludable. Desde reducir los carbohidratos, hasta pasar por el gimnasio e incluso dormir más temprano. Esto, como era de esperarse en las primeras veces, seguramente fue un fracaso rotundo al momento en el que nos dejamos llevar por la comida chatarra o por alguna salida que nos hizo tropezar.

Sin embargo, es durante estas etapas en las que vamos aprendiendo mucho más sobre cómo es que funciona nuestro cuerpo y cuáles pueden llegar a ser nuestras debilidades. Además, también aprendemos a identificar algunas conductas que nos pueden ayudar no solo a mantenernos en forma, sino a ser más saludables. Entre las más conocidas está la de la famosa regla de los o vasos de agua al día, es decir, dos litros diarios.

Aunque esto parezca ser algo imposible de refutar, lo cierto es que muchos estudios se han hecho al respecto y otras investigaciones aseguran que la clave de la buena hidratación no está en la cantidad, sino en la composición del líquido que se elija para recargar el organismo. 

Es debido a esto que la clave de una buena hidratación se halla en los electrolitos. Minerales presentes en la sangre y otros líquidos corporales que llevan una carga eléctrica y que son esenciales para el correcto funcionamiento de nuestro cuerpo. Además, ayudan a generar un equilibrio del pH y la contracción nerviosa.

Estos minerales son fundamentales para la transmisión de los impulsos nerviosos y la contracción muscular. Cuando los niveles de electrolitos son bajos, se pueden experimentar sensaciones de calambres musculares, debilidad o fatiga. 

Debido a esto te vamos a contar que puedes encontrar una gran cantidad de electrolitos a través del sodio, potasio, calcio, magnesio y cloruro, por lo que mantenerse hidratado no solo se basa en la cantidad de vasos que se beba al día, sino en cómo se recomponen los electrolitos que se gastan durante el día, sobre todo después de realizar una rutina de ejercicios. 

Además, claro está, la forma predilecta para reponer los electrolitos es a través del agua, las bebidas deportivas, electrolitos, carbohidratos y demás elementos como las frutas. Es principalmente encontrar un balance entre nuestra alimentación, nuestra actividad física y los hábitos que tengamos durante el día.