Estiramientos post ejercicio para relajar los músculos

El entrenamiento regular es esencial para mantener un estilo de vida saludable, pero muy seguido nos olvidamos de la importancia de los estiramientos post ejercicio. Estos son fundamentales para ayudar a relajar los músculos, prevenir lesiones y mejorar la flexibilidad.

El realizar una rutina de elasticidad adecuada después del fin del ejercicio puede marcar la diferencia en cómo te sientes al día siguiente y promover una recuperación más rápida.

¿Por qué es importante estirar después de una rutina de ejercicio?

Ayuda a mantener y mejorar la flexibilidad muscular y la amplitud de movimiento en las articulaciones. Una buena elasticidad te permite realizar movimiento más amplios y fluidos durante el ejercicio y en la vida cotidiana, reduciendo así el riesgo de lesiones y mejorando tu rendimiento deportivo.

Los estiramientos también estimulan la circulación sanguínea en los músculos y tejidos, lo que ayuda a eliminar el ácido láctico y otros productos de desecho acumulados durante el ejercicio. Esto favorece a una recuperación más rápida y eficiente.

Además, los estiramientos post ejercicio pueden tener un efecto relajante en el cuerpo y la mente. Ayudan a liberar tensiones acumuladas durante la rutina fitness y pueden reducir los niveles de estrés y ansiedad.

• Estiramiento de piernas. Estirar la parte inferior del cuerpo es clave porque es la zona que suele sufrir mayor impacto y presión durante las rutinas. Siéntate en el suelo con las piernas extendidas, inclina el torso hacia adelante mientras alcanzas tus pies con las manos.
   
• Estiramiento de hombros y brazos. Para aliviar los músculos de la parte superior del cuerpo, coloca un brazo sobre el pecho, manteniéndolo recto, y con la otra mano, presiona suavemente el codo hacia el busto.
   
• Estiramiento de cuello. La tensión en los músculos puede causar muchos malestares. Comienza colocando una mano sobre la cabeza y, con suavidad, inclina el cuello hacia un lado, llevando la oreja hacia el hombro.
   
• Estiramiento de espalda. La espalda y el tronco es nuestro principal soporte y es el lugar donde hay más riesgos de lesiones. Siéntate en el suelo con las piernas flexionadas y los pies apoyados en el piso. Gira el torso hacia un lado y coloca el brazo contrario sobre la rodilla, ayudando a profundizar el estiramiento.