¿Por qué el segundo hijo tiene mayor probabilidad de ser más rebelde? Estudio lo explica

La construcción de la personalidad es algo siempre va a estar relacionada al tiempo. Es difícil mantener una misma esencia todos los años y mucho más si hablamos de las edades más tempranas. Aspectos tan fundamentales como la cultura y la crianza son finalmente detonantes importantes para que una persona sea de una manera u otra, así como claro está, el entorno en el que se va a desarrollar. 

Si hablamos de los primeros años, queda demostrado que muchos padres suelen educar a sus hijos basándose en lo que ellos vivieron de pequeños y aunque siempre hay puntos diferenciadores, la gran mayoría utiliza lo que ya saben para ir otorgándole valores y principios que lo puedan ayudar en su crecimiento como persona. Sin embargo, un reciente estudio llevado a cabo entre diferentes universidades de Estados Unidos, ha hecho un nuevo descubrimiento y es que de acuerdo a esta investigación, el segundo hijo de una familia tiene probabilidades más altas de ser problemático e, incluso, un delincuente. 

Para llegar a esta conclusión, la investigación giró en torno a la recopilación de miles de grupos de hermanos en Dinamarca y Estados Unidos, pero excluyendo a las niñas. A través de esta muestra se pudo determinar que los segundos hijos tienen entre un 20 y un 40% más probabilidades de ser malos en la escuela, convertirse en delincuentes o terminar en prisión. 

"Para el primogénito sus modelos a seguir son los adultos mientras para el segundo hijo sus modelos suelen el comportamiento irracional de niños de 2 años, es decir, sus hermanos mayores. Además, los padres no dedican el mismo tiempo a estos segundos hijos como dedicaron al primero. Esas dos diferencias luego tienen su reflejo en el mercado laboral y en los datos que hemos encontrado sobre delincuencia. Es muy difícil separar esos dos factores porque suceden al mismo tiempo", explica Joseph Doyle, investigador del MIT y la Oficina Nacional de Investigación Económica de Estados Unidos. 

Adicionalmente, los investigadores advirtieron de que este estudio no trata de generalizar, puesto que cada familia es diferente y de que claramente esta tendencia puede ser rota a través de una buena educación por parte de los padres. Ser el segundo hijo no te convierte en un futuro delincuente, pero tal vez es algo que debamos tener en cuenta si es que en algunos años tengamos un hijo o si el que tenemos todavía se encuentra en una etapa de desarrollo.