Outfit: No saber qué ropa ponerte produce ansiedad

A todas nos ha pasado que nos levantamos para ir al trabajo o a la universidad, y no sabemos qué ponernos. Pasamos varios minutos frente a nuestro closet esperando que mágicamente el outfit perfecto aparezca. Pero no solo es la ropa, también es el qué comer, a dónde ir, sumados a los pendientes de la oficina que nos pueden causar estrés, que, aunque no lo parezca, podría llevarnos a desarrollar problemas de ansiedad mucho más graves de lo que esperabas.

Jo Hemming, psicóloga conductual de medios y celebridades en Inglaterra, habla sobre este tema y lo que reveló nos ha dejado sorprendidas a todas. “Cuando te encuentras demasiado presionada por encontrar la mejor opción de algo, se le conoce como la paradoja de la elección”.

Esto se debe a que a diario nos encontramos frente a diferentes momentos de nuestra vida que nos lleva a decidir, ya sea un canal de televisión, qué comer, con quien salir, entre otras. Se ha demostrado -a través de muchos estudios- que tomar una decisión con muchas opciones nos genera ansiedad. Aquí podríamos aplicar la ley de “menos es más”, así evitaríamos que nuestro cerebro se sobrecargue y se estrese al no saber qué decisión tomar.

Una de las recomendaciones que la psicóloga nos ofrece es “organizar la ropa por tipo y color”. De esta forma será mucho más sencillo encontrar la ropa que necesitas por la mañana y evitaremos estresarnos en las primeras horas del día. Puedes ordenar tus pantalones de un lado y tus polos del otro. Cuando ya tengas todo separado, ordénalo por secciones de color. Esta es una forma de engañar a nuestro cerebro, haciéndole creer que la decisión es menos complicada.

Otra manera de ayudar a tu materia gris, es escoger un día antes la ropa que te vas a poner. ¿No lo habías hecho antes? Pues ya es momento de hacerlo. Aunque parece bastante obvio, esto evitaría que te sientas presionada por las mañanas, más aún cuando en las primeras horas del día, el tiempo -pareciera- pasa volando.

Coloca todo lo que necesitas como maquillaje y accesorios a la mano. Al día siguiente, no te permitas cambiar de opinión y usa lo que ya has escogido. Esto ayudará a disminuir tu estrés y te permitirá comenzar el día de la mejor manera.

Como dato extra podríamos recomendarte que te deshagas de toda aquella ropa que ya no utilizas y que por alguna razón todavía guardas. Si te cuesta desecharla, simplemente colócala en otra habitación para que cuando la necesites, puedas ir a buscarla. Pero, si estás segura de que no te servirá de nada, es mejor que no te siga estorbando y donarla a quienes de verdad le darán uso.