Altas temperatura de las manos puede decir si tienes artritis

La artritis reumatoide es una enfermedad que se da cuando el sistema inmunitario de la persona ataca por error los tejidos del cuerpo. Del mismo modo, este trastorno inflamatorio crónico no solo afecta a las articulaciones, en algunas pacientes, puede dañar incluso distintos sistemas corporales como la piel, los ojos y el corazón.

Debido a que la artritis reumatoide tiene síntomas muy similares a otras enfermedades y su diagnóstico en una etapa temprana es muy difícil, es que a muchas personas que la padecen y ya presentan dolores articulares, hinchazón o enrojecimiento, se les hace muy complicado controlar la enfermedad.

Sin embargo, un nuevo estudio podría ayudar con su detección a tiempo. La investigación publicada en la revista Nature, señala que las imágenes térmicas podrían convertirse en un nuevo método para la evaluación y posible diagnóstico de este mal, que a medida que va avanzando puede llegar a deformar las articulaciones de quien la padece.

Para ello se necesitaron de 82 participantes voluntarias de los cuales 51 estaban sanas y 31 padecían de artritis reumatoide. A todas y cada una de ellas se les descartó cualquier otro mal que pueda afectar con los resultados del estudio. Las participantes fueron examinadas por dos reumatólogos siendo Alfred Gatt, de la Universidad de Malta y miembro visitante de la Universidad de Staffordshire y uno de los autores del estudio, quien confirmó el uso de la cámara térmica Flir T630.

"La termografía es una técnica emergente con el potencial de ser una importante herramienta clínica en varios campos de la medicina, ya que las enfermedades varían la magnitud y el patrón de emisión de calor de las personas afectadas" afirma el autor principal de la investigación.

Los resultados arrojaron que las curvas de probabilidad con respecto a la temperatura de las manos, entre las pacientes sanas y con artritis, se cruzaban en los 31,5°C, lo cual indicaba que las personas cuyo mercurio se encontraba por debajo de esa cifra tenían más probabilidad de encontrarse sanas, mientras que de las que su temperatura es superior a ella, son más propensas a sufrir ese trastorno. Lo mismo ocurre con la temperatura de los dedos, cuyas curvas de probabilidad chocan en los 30,3 °C.

"Este hallazgo es posible que siente las bases para estudios posteriores en esta área emergente y esta práctica clínica" expone el informe.

La termografía pudo detectar signos de la enfermedad mucho más rápido que cualquier otro método, sin embargo, todavía hacen falta más estudios que ayuden a determinar cuáles son las causas que desencadenan esta enfermedad y los métodos más efectivos para su detección a tiempo.