Avispas gigantes causan zozobra en Estados Unidos y Latinoamérica

Se dice que estas avispas pueden acabar con toda una colmena de abejas en cuestión de horas.

Whatthegirl.com
Whatthegirl.com

Se dice que estas avispas pueden acabar con toda una colmena de abejas en cuestión de horas.

En artículos anteriores, hemos hablado sobre la importancia de las abejas y otros insectos polinizadores para el equilibrio de nuestro ecosistema y, de cómo gracias a la cuarentena, el crecimiento de las flores silvestres podría incrementar el número de la población de esta especie de animales.

Sin embargo, la llegada del avispón asiático gigante (Vespa mandarinia) o mejor conocida como ‘avispa asesina’, pondría nuevamente en peligro a las abejas autóctonas, pues estas avispas, son capaces de exterminar una colmena de abejas en cuestión de horas gracias a sus potentes mandíbulas.

Esta clase de avispas son las más grandes del mundo, pues llegan a medir hasta 5 centímetro de longitud y tener una envergadura de alas de unos 7,5 centímetros. Se caracterizan por poseer una cabeza grande naranja, con ojos enormes y un abdomen rayado negro y amarillo.

Investigadores y autoridades del estado de Washington, han mostrado su preocupación tras la aparición de estos insectos, pues al ser consideradas una especie invasora, representan un gran riesgo para las abejas, especialmente para las melíferas, a quienes atacan mortalmente en el caso de los adultos y devoran a las larvas y ejemplares jóvenes.

Además de que su presencia representa peligro para las abejas, en Japón, el ataque de estas avispas mata alrededor de 50 personas al año, ya que el individuo que recibe sus tóxicas picadas, puede fallecer incluso sin tener alergia alguna a estos animales.

Por otra parte, quien advirtió de la presencia de estos animales fue un apicultor que se encontraba en su hogar, cuando se dio cuenta de que sus abejas habían sido decapitadas, pues las avispas acostumbran a matar a las abejas decapitándolas y volando con sus cuerpos para alimentar a sus crías.

Este hecho obligó a que los investigadores salgan a buscar a las colmenas de estos avispones, con el objetivo de que no se establezcan en el país, salvaguardando las comunidades de abejas que ya se han visto en peligro debido a la contaminación y la destrucción de su hábitat.

“Esta es nuestra ventana para evitar que se establezca y si no podemos hacerlo en los próximos años, probablemente no se pueda hacer”, explicó Chris Looney, entomólogo del Departamento de Agricultura del Estado de Washington.

Por otro lado, casos de avistamientos de estos animales también han sido reportados en países de Latinoamérica como Chile, donde un apicultor capturó a una de estas en un contenedor.